Aclarado el concepto, cabe preguntarse: ¿para qué una computadora en la nube si se necesita una computadora física para acceder? En primer término, como ya se dijo, hay prestadores que entregan un dispositivo físico en comodato, con lo cual en este caso se evita tener que invertir en computadoras. Por un abono mensual es posible contar con la PC con licencias de Windows Originales con mantenimiento incluido, que además usualmente cuenta con un servicio de backup.

Puede ser que se utilice Teamviewer o una aplicación similar para acceder a la PC en forma remota. Los problemas de este método, y que las computadoras en la nube resuelven, son dos. Teamviewer tiene baja calidad de respuesta gráfica, solo sirve para actividades específicas y cortas; por otro lado si la PC se apaga por un corte de luz, se reinicia por una actualización o se cuelga, no se tiene más acceso.

Adicionalmente este servicio resuelve el problema del acceso al SIAP de múltiples usuarios. evitando las soluciones insatisfactorias que usualmente se utilizan, que son instalar un solo SIAP para todo el Estudio en la máquina de un usuario o instalar un SIAP en cada uno. En los servicios de computadoras en la nube, como el servidor es compartido por todos los usuarios del Estudio, puede tenerse un SIAP común que puede ser accedido por cualquier usuario, aunque no concurrentemente. Al mismo tiempo se puede instalar un SIAP por usuario, que puede ser accedido por todos, sin interferir en sus actividades informáticas.

En resumen, las computadoras en la nube además de tener las mismas funcionalidades que una computadora física y operarse de la misma forma porque tienen sistema operativo Windows, permiten acceder a ellas desde cualquier lugar, mantienen la información siempre protegida, resuelven el acceso al SIAP de múltiples usuarios y evitan tener que invertir en equipamiento informático a un precio accesible. 

Información cedida por el Ingeniero en Electrónica Juan Pablo Ravignani.