Con el título de Contador Público obtenido en la Universidad Nacional de Mar del Plata y luego de una activa presencia en espacios de participación profesional, la Dra. Romina Hernández (32 años) es la nueva Presidenta del Comité Provincial de Jóvenes Graduados.

Su espíritu crítico favorece a la comprensión del presente de los nuevos profesionales que se incorporan al mercado laboral al mismo tiempo que deben continuar capacitándose.

Sus comienzos, su presente y un mensaje para las nuevas generaciones.

Con el título de Contador Público obtenido en la Universidad Nacional de Mar del Plata y luego de una activa presencia en espacios de participación profesional, la Dra. Romina Hernández (32 años) es la nueva Presidenta del Comité Provincial de Jóvenes Graduados.

“Desde muy chica siempre quise estudiar Ciencias Económicas al comprender que las sociedades se conforman de organizaciones, y que los profesionales en ciencias económicas podemos aportar muchísimo a la vida de ellas”, explica la Dra. Hernández y agrega: “En la construcción de una empresa, una ONG, una cooperativa, un club, etc, muchas personas dejan parte de su vida y ponen muchísimo esfuerzo. Se generan expectativas, ilusiones, anhelos y poder ayudar a que ese proyecto siga adelante, logre sus metas y esos deseos se conviertan en realidad, da una satisfacción muy grande”.

Al respecto la profesional aclara que “también me motivó a elegir las ciencias económicas entender que es a través del análisis de los números donde descubrimos las reales intenciones de quienes lideran las organizaciones, cuáles son sus prioridades, las políticas que se llevan a cabo, porque más allá de las intenciones, lo concreto de la realidad lo vemos en los distintos informes económicos y financieros”.

Graduada en 2014 en la Universidad Nacional de Mar del Plata, la colega considera que las carreras de Ciencias Económicas siguen estando en la cima de las carreras universitarias más elegidas, entre otros motivos, porque “se trata de carreras muy completas, con una formación básica en varias disciplinas como la administración, la contabilidad y la economía, pero también en derecho, sistemas de información, historia, ética, entre otras”. Desde su mirada, esto brinda a los profesionales una amplia salida laboral, que no solo es beneficiosa para poder incorporarse rápidamente al mercado de trabajo, “sino que además nos permite encontrar la rama de nuestra profesión que más disfrutamos, convirtiéndonos en personas privilegiadas, al poder trabajar de lo que nos gusta”.


Siempre con las organizaciones sin fines de lucro

“Mi primer trabajo fue en el Colegio de Abogados de Mar del Plata, una experiencia muy positiva que me permitió incorporar muchos cambios desde una visión profesional que mejoraron la eficiencia de la organización para sus matriculados”, recuerda la contadora pública. A esa experiencia luego le siguió el gerenciamiento de la Fundación de la Universidad Nacional de Mar del Plata, lo que significó su incorporación a la Administración pública, primero como Subsecretaria de Administración Financiera de la Universidad, y ahora como Secretaria de Asuntos Laborales.

“Me parece un interesante desafío el desarrollo de la profesión en la Administración Pública, donde nuestra mirada en los temas públicos es fundamental, y es un ámbito que tiene mucho para desarrollarse desde el Consejo Profesional”, asegura la Dra. Hernández.

Su vínculo con la Facultad que la formó continúa como docente. La Dra. Romina Hernández afirma que en la docencia encontró “una de las facetas más transformadoras de nuestras profesiones, transmitiendo una visión crítica de nuestras carreras y un compromiso ético y profesional en nuestro desarrollo laboral”.

Es a través del análisis de los números donde descubrimos las reales intenciones de quienes lideran las organizaciones

A su defensa de la formación universitaria, de los conceptos fundamentales y de las herramientas que brinda la formación de grado, la Dra. Hernández agrega que “con esa formación universitaria no alcanza” y al respecto sostiene: “El mundo es cambiante y más la porción de realidad en la que nos toca actuar. Para poder ejercer nuestra profesión de forma responsable necesitamos capacitarnos continuamente, no solo en las novedades normativas impositivas o contables sino también en herramientas de comunicación y oratoria, liderazgo, trabajo colaborativo, nuevas tecnologías, etc”.

Su acercamiento al Comité de Jóvenes Graduados

En sus años cursando la carrera, la actual Presidenta del Comité Provincial de Jóvenes Graduados, canalizó su interés por asistir a los espacios de participación siendo consejera académica y presidenta del Centro de Estudiantes, “porque me interesaba aportar en mejorar mi formación profesional y cuando me recibí enseguida quise participar en el Consejo”, afirma.

“Me interesaba acercarme para estar actualizada del devenir de mi profesión, y porque el pertenecer me daba la confianza que necesitaba para salir al mercado laboral, ya que cuando recién terminás la facultad los miedos abundan”, reconoce la Dra. Fernández y subraya: “El espacio del Consejo y del Comité permite trabajar con otros, aprender con otros y sobre todo nos da la posibilidad de ser parte de los cambios que necesitamos para mejorar nuestra profesión. Ser parte de esta comunidad brinda muchos beneficios, que aunque a veces no se pueden valorar monetariamente siempre rinde sus frutos en el futuro, nos ayuda a ser mejores profesionales, y diferenciarnos en nuestro desarrollo laboral”.

 

Problemáticas de los jóvenes en el ejercicio profesional

“Creo que la principal problemática como todo recién graduado es decidir qué parte de la profesión nos gustaría ejercer, y poder ganar experiencia rápida para desenvolvernos de la mejor manera en nuestra vida laboral”, advierte la Dra. Hernández y reitera que en este aspecto “la participación en el Consejo Profesional es de mucha ayuda”.

Entre los escollos que aparecen en los primeros años, la Dra. Hernández identifica que “a veces tenemos los trabajos que van surgiendo y no siempre son los que más nos gustan. Generalmente empezamos con tareas administrativas y la mayor dificultad es hacer valer nuestro título y poder conseguir trabajos donde aportemos desde nuestra mirada integral como graduados en Ciencias Económicas”.

Me parece un interesante desafío el desarrollo de la profesión en la Administración Pública, donde nuestra mirada es fundamental

Sobre la inserción laboral, la contadora pública explica que “si trabajás en empresas no siempre es en puestos profesionales; y si lo hacés en estudios, mayormente es en condiciones laborales informales”. Por su parte, según la Presidenta del Comité de Jóvenes, quienes logran abrir su propio estudio “encuentran las problemáticas de la mayoría de la matrícula que se dedica al asesoramiento tributario: un sistema impositivo demasiado complejo, con modificaciones constantes y con poco tiempo para ser estudiadas y analizadas”.

Para poder ejercer nuestra profesión de forma responsable necesitamos capacitarnos continuamente

A ello hay que sumar que “la mayoría de los primeros clientes son monotributistas, ya que este complejo sistema impositivo genera una alta dificultad para poder llevar adelante las obligaciones tributarias para el contribuyente, debiendo acudir a un profesional que requiere cada vez de mayor dedicación laboral y que la mayor parte de las veces es difícil poder trasladar ese costo al cliente”, explica la Dra. Hernández.

Por si fuera poco, “otro inconveniente que aparece es que la mayoría de las empresas cuentan con un solo profesional para el asesoramiento permanente, elaboración y auditoría de los estados contables vigentes”, por lo que “cuando analizamos los diversos roles que cumplimos los profesionales en ciencias económicas de manera simultánea con cada cliente es difícil entender cuáles son las normas a cumplir”.

Finalmente, la Dra. Romina Hernández, Presidente del Comité de Jóvenes Graduados indica que “se nos presenta el desafío de comunicar a nuestros clientes y a la sociedad en general, cuál es nuestra responsabilidad como profesional, para dejar atrás viejos prejuicios y construir una imagen más real de nuestras profesiones”.


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