Realidad Profesional | Revista del Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Provincia de Buenos Aires y su Caja de Seguridad Social
La obligatoriedad de la emisión de facturas electrónicas empujó a miles de agentes al sistema. Pero a pesar de su universalidad, aún genera dudas. Para dar respuesta, Errepar reeditó por quinta vez su libro “Factura electrónica” en el que su autor, el Dr. Hernán D’Agostino despeja en un lenguaje claro los principales interrogantes, pero afirma sin titubeos que el sistema “no aportó mucho a la administración”, sino que más bien representó “una complicación” para los profesionales en Ciencias Económicas.
Desde la implementación de la factura electrónica en Argentina, el número de contribuyentes que ha adoptado este sistema ha ido creciendo progresivamente. Si bien el sistema se presentó como beneficioso, la adhesión masiva llegó cuando la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) lo estableció como obligatorio mediante sucesivas normativas; y a pesar de que ya lleva años de vigencia, su utilización genera muchas dudas.
Tantas, que la editorial ERREPAR ya va por la quinta edición del libro titulado “Factura electrónica”, una obra que se constituye como una guía para todos los profesionales que se encuentran con la necesidad de asesorar a un cliente en relación con el tema. Clientes que ya no son la excepción sino la norma, pues tal como aclara su autor, el Dr. Hernán D’Agostino, a la fecha están exentos de emitir factura electrónica “solamente los monotributistas inscriptos en el Registro Nacional de Efectores de Desarrollo Local y Economía Social y los que integran el Régimen de Inclusión Social y Promoción del Trabajo Independiente. El resto de los contribuyentes está obligado”.
El libro, concebido con un enfoque netamente práctico y con el fin de sistematizar las normas vigentes, cuenta con 160 páginas en las que se pretende dar solución a aquellas preguntas simples cuyas respuestas parecen difíciles de encontrar: ¿Cómo genero un punto de venta?, ¿Cómo confecciono una factura electrónica?, ¿Cómo controlo la validez de una factura?, ¿Qué es una factura de crédito electrónica?, entre otros interrogantes.
“Todos los sectores han incorporado el sistema adaptando su administración”, explica el Dr. D’Agostino. Consultado acerca de la aceptación de los contribuyentes, el autor del libro explica que “con el paso del tiempo se simplifica la emisión de las facturas electrónicas en forma manual a la vez que aparecen productos comerciales que integran el servicio de AFIP por lo que la resistencia inicial de los contribuyentes ha cedido”. Sin embargo, aclara: “Por supuesto que aún hay sectores con dificultades que requieren asistencia, como las personas mayores o los artistas”.
Contador público y profesor universitario, el Dr. Hernán D’Agostino considera que para los profesionales en Ciencias Económicas la factura electrónica representó “una complicación” ya que “no se trata de una verdadera factura electrónica sino un sistema de control del estado que no aportó mucho a la administración, excepto tal vez el ahorro en papel y tinta”.
“Hoy la norma es de aplicación clara y universal por lo que no se generan dificultades serias”, asegura el autor y comenta: “Solamente alguna dificultad operativa y por supuesto las zonas que no están alcanzadas por una buena infraestructura de internet”.
No obstante, a pesar de la universalidad de la normativa, en el libro no solo se describe el procedimiento para la emisión de los comprobantes en línea, se explica el régimen de factura de crédito electrónica y se comenta los principales aspectos del libro de IVA digital, entre otros temas, sino que se incluyen las respuestas a las dudas más usuales y el autor expone su opinión respecto de algunos casos controvertidos del régimen.
En particular, consultado acerca de qué beneficios ofrece la factura de crédito electrónica, el Dr. Hernán D’Agostino asegura que “a los contribuyentes no les da beneficios; sólo obligaciones” y concluye: “Ni siquiera estamos a salvo de las facturas apócrifas ya que el sistema no garantiza la validez del comprobante y genera la obligación de consultar cada comprobante para no ser solidariamente responsable con el emisor”.
Para mayor información sobre el libro, visite su presentación en la tienda online de editorial Errepar.