Realidad Profesional | Revista del Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Provincia de Buenos Aires y su Caja de Seguridad Social
El historial crediticio es un registro detallado, emitido por una entidad especializada y autorizada, sobre todos los antecedentes y actividades financieras de personas o empresas, como por ejemplo pagos de servicios o productos financieros. Mantenerlo en las mejores condiciones es fundamental. Por lo tanto, este registro también es muy importante para el trabajo y labor de los profesionales de las ciencias económicas que se dedican al asesoramiento financiero y contable de empresas y emprendedores.
El historial crediticio es un registro detallado, emitido por una entidad especializada y autorizada, sobre todos los antecedentes y actividades financieras de personas o empresas, como por ejemplo pagos de servicios o productos financieros.
Mantener este informe en las mejores condiciones es fundamental, por lo que emprendedores y empresas deben prestarle mucha atención, ya que puede afectar la capacidad para conseguir o no financiamiento.
Por lo tanto, este registro también es muy importante para el trabajo y labor de los profesionales de las ciencias económicas que se dedican al asesoramiento financiero y contable de empresas y emprendedores.
Se puede decir que este historial es una especie de carta de presentación dentro del mundo financiero, de él depende en gran parte el acceso o no a nuevos productos que en algunas situaciones resultan indispensables, como por ejemplo créditos o préstamos y sobre todo cuando se habla de Pequeñas y Medianas Empresas.
Las entidades financieras toman muy en cuenta el nivel de riesgo que asumen al otorgar un préstamo, un crédito o tarjetas de crédito o débito, por lo que utilizan este registro para conocer y evaluar la solvencia y capacidad de pago que tiene un emprendedor o empresa al momento de solicitar dichos productos.
Es decir, este registro sentencia el perfil de las personas o empresas, hablando en sentido financiero. Sirve para analizar de manera anticipada cómo se comportará una persona o empresa como cliente y cuál es su nivel de cumplimiento, tomando como referencia la responsabilidad que presentó ante otras obligaciones que contrajo en el pasado, para así estimar si podrá cumplir con otras.
Para ello el primer punto es ser responsable con las fechas de pago de tarjetas, facturas de servicios, créditos y/o préstamos. Y aunque las distintas entidades financieras consideran diferentes criterios al momento de evaluar, sirven además las siguientes medidas:
- Tener un balance positivo en la cuenta bancaria.
- Contar con un denominado “colchón financiero”, es decir intentar que la diferencia entre los gastos y los ingresos sea superior a la cuota del préstamo o crédito solicitado.
- Contar con ingresos medios o altos.
- No tener muchos créditos o préstamos abiertos a la misma vez.
- No haber contratado micropréstamos/créditos.
Para lograr esto es recomendable por un lado, conocer bien y tener presentes y agendadas con anticipación las fechas de pago y de vencimientos, y por otro y lo más importante pagar siempre en término. Se sugiere llevar un muy buen control de los gastos, teniendo en cuenta la capacidad de pago mensual que se maneja y cuáles son los gastos que se realizan, para contar con el dinero disponible y poder mantener al día las obligaciones de pago.
Para proteger este historial, también es importante que al momento de solicitar algún producto financiero se comparen plazos, costos y beneficios adicionales de cada entidad considerada, y luego de eso calcular la propia capacidad de cumplir con el compromiso según las fechas de pago. Además, para evitar inconvenientes es recomendable asegurarse de que sean entidades financieras formales y con buena reputación.
También, en el caso de las tarjetas de crédito lo aconsejable es evitar el pago mínimo del resumen y completar el pago total, para no generar intereses ni faltas en los pagos. Para esto funciona la selección de la opción del débito automático por el total de la cifra, aunque de elegirla se debe controlar siempre de cerca para revisar que no haya irregularidades.
Asimismo, una buena práctica es revisar el historial crediticio regularmente y controlar que se mantenga prolijo. Una forma de acceder al mismo es a través del Banco Central de la República Argentina (BCRA) en la página web de la Central de Deudores del Banco Central, ingresando con CUIT, CUIL o CDI.