Realidad Profesional | Revista del Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Provincia de Buenos Aires y su Caja de Seguridad Social
El coaching, un anglicismo que resuena bastante últimamente y que se traduce al castellano como “entrenamiento”, refiere a una práctica que gana cada vez más adeptos. Esta disciplina, similar a la terapia psicológica, puede ser utilizada para lograr diferentes objetivos y mejorar situaciones con las que no se está cómodo en la vida cotidiana. La Dra. Betiana Rocha, es contadora pública y Coach, y trae la novedosa idea de vincular ambas actividades, enfocando sus talleres y consultas a sus colegas.
El coaching, un anglicismo que resuena bastante últimamente y que se traduce al castellano como “entrenamiento”, refiere a una práctica que gana cada vez más adeptos. A través del mismo se generan procesos que apuntan al entrenamiento en habilidades de comunicación y liderazgo, con la idea de fomentar el autoconocimiento y la relación con el entorno. El reconocimiento y la gestión de las emociones ocupan un lugar fundamental.
Esta disciplina, similar a la terapia psicológica, puede ser utilizada para lograr diferentes objetivos y mejorar situaciones que generan incomodidad en la vida cotidiana. La Dra. Betiana Rocha, es contadora pública y Coach, y trae la novedosa idea de vincular ambas actividades, enfocando sus talleres y consultas a sus colegas.
No todo es contabilidad para la Dra. Rocha, quien llegó al coaching luego de su propia experiencia como paciente de terapia convencional: “Esos aprendizajes que se fueron dando en terapia los llevaba mucho a la profesión en la parte de equipos, de cómo resolver situaciones complicadas, y me di cuenta como que tenía esa facilidad”, menciona Betiana y confiesa que en ese momento tuvo la idea de empezar a estudiar Psicología, pero empezar otra carrera universitaria llevaba tiempo que no tenía, por lo que en esa búsqueda encontró al coaching: “Fui a clases, a averiguar qué era, y ahí fue la magia de decir, ésto es lo que necesito, es lo que quiero y arranqué el camino en el 2016, y en el 2018 finalice la cursada”.
En comparación con otro tipo de prácticas, la Dra. Rocha afirma que el coaching“no es una consultoría, no es una asesoría, no es counseling, ni terapia, son todas diferentes cosas. Tiene una particularidad, muy importante, que es que busca la transformación de la persona, busca indagar a la persona ver qué la traba, qué le pasa emocionalmente, para encontrar la respuesta por sí misma”.
Según Betiana, se trata de que la persona emprenda un camino de transformación en el que revisa todo su sistema de creencias personales, sus valores y las situaciones por las que ha atravesado en su vida, que hacen que actúe y tome decisiones de determinadas maneras. La revisión en retrospectiva es necesaria si lo que se desea es cambiar.
Entre plazos que demandan ser cumplidos, los clientes y demás obligaciones, la profesión a veces juega malas pasadas e influye de manera negativa en la vida personal y en el entorno cercano, es así que las primeras consultas de la Dra. Rocha, eran de contadores: “Venían por el entorno laboral, la presión, el desborde. Muchos temas que pasan en la profesión. Ahí me di cuenta que esos casos se resolvieron muy bien, la persona tuvo una transformación muy importante que a su vez se trasladó a todo su entorno”.
Fue así que Betiana se dio cuenta de que sus conocimientos sobre la profesión en vinculación con el coaching, podrían resultar en una buena combinación: “Este lugar que aparte para mi es conocido, a mi también me resultó conflictivo en un montón de cosas, y sé que puedo aportar mucho desde mi propia experiencia, y dije necesito mostrar esto y empezar a hacer públicos temas de los contadores, que dicen que la profesión es así y no hay nada para hacer, y hay un montón para hacer”. Y desde entonces, acompaña a colegas en la búsqueda por mejorar la práctica profesional diaria.
El camino iniciado cuando se consulta a un Coach implica un trabajo de introspección, que tiene que ver con el reconocimiento y manejo de las emociones. En este sentido, la Dra. Rocha, afirma: “El miedo es una de las más recurrentes, el desborde, la ansiedad, el enojo, la frustración, la desmotivación”, y concluye que en realidad trabaja con todas las emociones: “Porque somos humanos y las emociones las tenemos, están ahí y tienen una función importante”.
La Dra. Rocha realiza consultas particulares y también sesiones grupales, semanales o quincenales, y menciona que con cada consultante será distinto el camino recorrido. Lo recomendado por ella son 4 sesiones, aunque reconoce que existen casos en los que se requieren resolver cosas puntuales y por ende conllevan menos encuentros. Además, lleva adelante talleres online con propuestas que invitan a trabajar problemáticas conocidas en el entorno profesional.
Desde el punto de vista de la Dra. Rocha, como contadora y coach, la profesión por sí misma no existe: “No es más que lo que somos nosotros mismos. Hay cosas externas que no podemos cambiar, no podemos cambiar lo que hacen los organismos fiscales o lo que piensa la sociedad del contador, pero hay un impacto fundamental de nosotros mismos y no del contador, de cada uno, que va a impactar en la sociedad, entonces el primer cambio está en lo que somos nosotros”, afirma.
Para la Dra. Rocha es fundamental empezar a enfrentar las emociones y las situaciones de la vida con la que no se está cómodo: “Mi mensaje es que se animen a transitar sus propias emociones, a ver que hay otras posibilidades de ejercer la profesión de una manera más sana. Está el caos, yo no digo que no haya situaciones que nos desbordan, pero todo cambia cuando uno se empieza a mirar internamente y empieza a resolver diferente”.
Y los primeros pasos para lograrlo, según Betiana, pueden darse a través del coaching: “El coaching tiene eso, animarse a dar esos pasos y decir qué puedo hacer yo desde mi lugar para que esto mejore tiene un poder muy importante, y realmente todo cambia”.